Para Gabriela, Formaje no es solo un destino para sus catering creativos; es un paraíso para los amantes del queso artesanal. Este espacio, diseñado por Cobalto Estudio, que transforma el queso en arte, es uno de sus sitios favoritos. Con estanterías que replican la textura del queso artesanal, el lugar es cálido y auténtico. En su bodega subterránea aseguran una maduración perfecta, se ofrecen catas exclusivas y eventos privados. Formaje, en sus palabras, celebra la artesanía quesera como un arte vivo. Es un homenaje a la tradición gastronómica.

Como chef, Gabriela sabe dónde disfrutar de una buena comida, y Pacífico es una hamburguesería de smashed burgers deliciosas. Pierre, el dueño, es un parisino que vino a Madrid por amor y utilizó su savoir faire para crear este espacio inspirado en la costa californiana, con recetas hechas en casa. Con dos opciones de hamburguesa —no hace falta más— y opciones vegetarianas, el ambiente es ideal, con mucho estilo.

Uno de los restaurantes favoritos de Gabriela desde sus días como speakeasy, Gota es un bar clandestino especializado en vinos naturales —los preferidos de Gabriela— y kombucha. Este espacio, con detalles curiosos y un ambiente acogedor, es ideal para disfrutar de un afterwork relajado o una buena comida.